El Real Madrid logró clasificar a la final de la Copa del Rey en un partido que dejó más preguntas que respuestas sobre el arbitraje. La actuación del colegiado Alberola Rojas y la falta de intervención del VAR han sido objeto de críticas por parte de jugadores y aficionados.
Desde el inicio del encuentro, las decisiones arbitrales generaron controversia. Un claro penalti sobre Bellingham no fue sancionado, lo que desató la indignación entre los jugadores del Madrid. Vinícius Júnior no pudo contener su frustración tras recibir una falta brutal que tampoco fue castigada con tarjeta roja.
“Es inexplicable, es una roja clarísima…” fueron las palabras de Vinícius al ver la repetición de la jugada. La falta de atención del VAR en momentos críticos ha puesto en duda la eficacia del sistema en situaciones decisivas.
A pesar de estas controversias, el Madrid logró mantener la calma y, tras un partido lleno de altibajos, se llevó la victoria gracias a un gol de Rüdiger en la prórroga. “El fútbol es así, hay que seguir adelante”, dijo Ancelotti tras el encuentro, aunque no pudo evitar referirse a las decisiones arbitrales.
El Madrid ahora espera rival en la final, mientras que la polémica sobre el arbitraje continúa en el aire, dejando a muchos cuestionando la imparcialidad en el fútbol español.