La noche del Emirates Stadium será recordada por los aficionados del Arsenal como una de las más gloriosas. El equipo londinense se impuso al Real Madrid con un claro 3-0, y el protagonista indiscutible fue Declan Rice, quien anotó dos impresionantes goles de falta directa.
El primero de sus tantos llegó tras un lanzamiento que sorprendió a Thibaut Courtois, quien no pudo hacer nada ante la precisión del disparo. El segundo, aún más espectacular, fue un golpeo que se coló en la escuadra, dejando al portero belga sin opciones. Rice se convirtió así en el héroe de la noche, logrando lo que ningún jugador había hecho en 20 años: marcar dos goles de falta al Real Madrid en un mismo partido.
Un triunfo merecido
El Arsenal no solo se destacó por la calidad de sus goles, sino también por su dominio total en el juego. Con 441 pases completados frente a los 384 del Madrid, y 34 recuperaciones de balón frente a 26, el equipo de Mikel Arteta mostró una superioridad manifiesta en todos los aspectos del juego.
La diferencia en el desgaste físico fue notable, con los jugadores del Arsenal recorriendo casi 114 kilómetros en comparación con los 101,2 kilómetros de los merengues. Esta estadística es un claro reflejo de la intensidad y el compromiso que mostró el equipo local, que sueña con alcanzar las semifinales de la Champions tras 16 años de espera.
Con este resultado, el Arsenal se coloca en una posición privilegiada para la vuelta en el Santiago Bernabéu. Sin embargo, el equipo sabe que el Real Madrid es un rival formidable y que la eliminatoria aún no está decidida. La afición espera que el equipo mantenga la misma intensidad y enfoque en el partido de vuelta, donde la historia del club estará en juego.