El Real Madrid logró una victoria crucial en el Santiago Bernabéu al vencer al Leganés por 3-2 en un encuentro que tuvo más emociones de las esperadas. A pesar de comenzar bien, el equipo merengue se vio sorprendido al encajar dos goles en un abrir y cerrar de ojos, lo que generó una gran preocupación entre los aficionados.
El partido comenzó con un claro dominio del Madrid, que se adelantó en el marcador gracias a un penalti ejecutado por Kylian Mbappé a lo Panenka, que dejó al portero del Leganés sin opciones. Sin embargo, la alegría duró poco, ya que el equipo pepinero respondió rápidamente con un gol de Diego García y, poco después, Raba puso el 1-2, dejando a los locales en shock.
La segunda mitad fue un torrente de emociones. El Madrid, con la necesidad de revertir la situación, salió decidido y Jude Bellingham logró igualar el marcador apenas comenzada la segunda parte. Con el apoyo de la afición, el equipo se lanzó al ataque y, tras una falta al borde del área, Mbappé volvió a brillar al anotar el gol de la victoria con un potente disparo que sorprendió al arquero.
El encuentro estuvo marcado por la polémica, especialmente en torno a las decisiones arbitrales. Carlo Ancelotti defendió a su equipo, señalando que también tuvieron motivos para quejarse de algunas decisiones. “No hemos jugado un mal partido, pero nos faltó equilibrio en defensa”, comentó el técnico tras el partido.
Con esta victoria, el Real Madrid se mantiene en la lucha por el título, igualando en puntos al Barcelona, aunque con un partido menos. El próximo desafío será crucial, ya que el equipo se prepara para enfrentar a la Real Sociedad en la semifinal de la Copa del Rey.