El futuro del cuerpo técnico de Carlo Ancelotti se ha definido de manera contundente. Tras el anuncio de que el italiano asumirá el mando de la selección brasileña a partir del próximo 26 de mayo, se ha confirmado que su hijo, Davide Ancelotti, no tomará las riendas de un club europeo como se había especulado. En lugar de ello, Davide se unirá a su padre en la canarinha, manteniendo su rol de asistente, tal como lo hizo en su etapa en el Real Madrid.
A sus 35 años, Davide ha decidido posponer su carrera como primer entrenador, eligiendo seguir acumulando experiencia en el entorno de la selección brasileña. Esta decisión no solo refuerza el vínculo familiar, sino que también le permitirá aprender de uno de los mejores entrenadores de la historia del fútbol. La dupla Ancelotti permanecerá unida hasta, al menos, el verano de 2026, cuando Brasil participe en el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá.
La mudanza de Carlo a Brasil será total. Tanto él como su esposa dejarán su residencia en Madrid para establecerse en el país sudamericano, donde se centrarán exclusivamente en su nuevo trabajo. Esta decisión pone fin a las especulaciones sobre un posible regreso a Londres o visitas esporádicas a Brasil.
El último partido de Carlo Ancelotti al frente del Real Madrid será el próximo 25 de mayo en el Santiago Bernabéu, donde se espera un emotivo homenaje al técnico más laureado de la historia del club. Antes de eso, dirigirá al equipo en el Sevilla-Real Madrid de la penúltima jornada de la Liga.
En su última rueda de prensa, Ancelotti se mostró satisfecho con el rendimiento de su equipo en la victoria ante el Mallorca, destacando la actitud y el esfuerzo de los jugadores a pesar de las numerosas bajas. "El equipo ha jugado muy bien. Ha peleado mucho, sobre todo en la segunda parte. Merecíamos la victoria", afirmó el italiano.
Con la salida de Ancelotti, también se producirá una reestructuración en el cuerpo técnico del Real Madrid. Sin embargo, Antonio Pintus y Lluís Llopis, quienes han sido parte fundamental del éxito del club, se quedarán para trabajar con Xabi Alonso, quien tomará las riendas del equipo en una nueva etapa que comenzará en breve.
La decisión de Davide de seguir a su padre en Brasil refleja no solo un fuerte lazo familiar, sino también una estrategia para crecer profesionalmente en un entorno competitivo y de alto nivel. La selección brasileña se prepara para un futuro prometedor bajo la dirección de Carlo Ancelotti, y la presencia de su hijo seguramente será un factor positivo en este nuevo capítulo.