La Audiencia de Valladolid se prepara para dar a conocer el fallo sobre el caso de los cinco aficionados que, durante el encuentro entre el Real Madrid y el Real Valladolid el 30 de diciembre de 2022, proferieron insultos racistas hacia Vinicius Jr.. En un acuerdo alcanzado entre la defensa de los acusados, la Fiscalía y el representante del jugador, se ha pactado una pena de un año de prisión, además de inhabilitación y multas que oscilan entre 1.080 y 1.620 euros.
Los hechos ocurrieron en el minuto 88 del partido, cuando Vinicius fue sustituido y se dirigía a su banquillo. En ese momento, los aficionados lanzaron insultos como "hijo de puta, puto mono, negro, puto marica...", lo que ha sido calificado como un delito de odio y contra la discriminación. Este comportamiento ha sido documentado por varias grabaciones realizadas por otros aficionados presentes en el estadio, las cuales se hicieron virales en redes sociales.
El acuerdo, que se hará oficial en la vista programada para el 21 de mayo, también incluye una inhabilitación especial para el derecho a sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, así como una inhabilitación para ejercer profesiones educativas y deportivas durante cuatro años. Solo uno de los acusados ha recibido una multa diferente, siendo sancionado con cuatro euros al día durante nueve meses.
Es importante destacar que no habrá indemnización a favor de Vinicius, quien ha decidido renunciar a cualquier compensación económica. La sentencia, una vez ratificada, será comunicada a la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, que ya había abierto expedientes administrativos contra los acusados.
Este caso ha tenido una gran repercusión tanto a nivel nacional como internacional, evidenciando la necesidad de erradicar el racismo en el deporte. La respuesta contundente de la justicia es un paso hacia la protección de la dignidad de los jugadores y la promoción de un ambiente más respetuoso en los estadios.