El Comité de Apelación de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha tomado una decisión que no ha sentado bien en las oficinas del Real Madrid. Este jueves, el organismo desestimó el recurso presentado por el club blanco en relación a la sanción de seis partidos impuesta a Antonio Rüdiger, tras su expulsión en la final de la Copa del Rey contra el FC Barcelona, disputada el pasado 26 de abril en Sevilla.
El árbitro del encuentro, Ricardo de Burgos Bengoetxea, dejó constancia en el acta que Rüdiger fue expulsado por lanzar un objeto desde el área técnica, un hielo que, afortunadamente, no alcanzó a nadie. Sin embargo, el colegiado también destacó que el jugador mostró una actitud agresiva, siendo necesario que varios miembros del cuerpo técnico lo sujetaran para evitar una mayor escalada de tensión.
El 29 de abril, el juez disciplinario único de la RFEF decidió imponer la sanción de seis partidos al central alemán, en virtud del artículo 101 del Código Disciplinario, que contempla castigos de entre cuatro y doce partidos por conductas violentas hacia los árbitros. A pesar de que el Real Madrid argumentó el arrepentimiento de Rüdiger, quien se disculpó públicamente en redes sociales, el recurso fue desestimado.
Con esta decisión, el defensa ya ha cumplido cuatro partidos de sanción, lo que significa que le restan dos encuentros antes de poder volver a estar a disposición del entrenador. La situación se complica aún más para el equipo, que deberá afrontar el inicio de la próxima temporada sin uno de sus pilares defensivos.
La tensión vivida en la final, sumada a la frustración por la derrota, fueron factores determinantes en el comportamiento del jugador. Rüdiger, tras el partido, expresó su pesar: "No hay excusa para mi comportamiento de anoche. Lo siento mucho, y lo siento por el árbitro. Jugamos un muy buen partido desde la segunda parte. Después de 111 minutos, ya no pude ayudar a mi equipo y, antes del pitido final, cometí un error".
A pesar de su arrepentimiento, el Comité de Apelación ha mantenido la sanción, lo que deja al Real Madrid en una situación complicada. Sin embargo, el club ha tomado medidas para cubrir la baja de Rüdiger, con la reciente incorporación de Huijsen, quien podría ser clave en la defensa durante su ausencia.
El equipo ya tiene la mirada puesta en el Mundial de Clubes, donde se espera que Rüdiger esté disponible, siempre y cuando su recuperación sea exitosa. En Valdebebas, la prioridad ahora es que el jugador se recupere lo antes posible para contribuir al éxito del equipo en el torneo internacional.