Luka Modric, uno de los grandes ídolos del Real Madrid, ha anunciado su despedida del club tras trece años de inigualable trayectoria. El mediocampista croata, que ha dejado una huella imborrable en la historia del club, se prepara para cerrar este capítulo después de participar en el Mundial de Clubes.
Desde su llegada en 2012, Modric ha sido un pilar fundamental en el equipo, acumulando un impresionante palmarés que incluye seis Champions League, cuatro Ligas, dos Copas del Rey, y un total de 28 títulos en 589 partidos. Su legado lo convierte en el jugador con más trofeos en los 123 años de historia del club.
En un giro inesperado, se ha revelado que Modric había considerado la posibilidad de continuar un año más, especialmente con la llegada de Xabi Alonso como nuevo entrenador. Según informaciones de El Larguero, el croata se puso en contacto con Alonso para explorar la opción de seguir en el equipo, pero la dirección del club ha decidido que es momento de un cambio generacional.
El propio Carlo Ancelotti, quien también se despide del club, ha elogiado a Modric en su última rueda de prensa, destacando su calidad y su capacidad para combinar talento y entrega. “Mañana me despido con Modric, quien ha sido un ejemplo para todos”, afirmó el técnico italiano, dejando claro el impacto que el croata ha tenido en el vestuario.
Modric se va con un legado que trasciende los números. Su visión de juego, su capacidad para controlar el ritmo del partido y su liderazgo han sido fundamentales para el éxito del Real Madrid en la última década. La afición madridista le recordará no solo por sus logros, sino también por su entrega y profesionalismo en cada encuentro.
La despedida de Modric marca el fin de una era dorada en el club, y aunque su ausencia se sentirá, su legado perdurará en la memoria de todos los aficionados. El Real Madrid se prepara para afrontar una nueva etapa, con la esperanza de que el espíritu de lucha y la calidad que Modric personificó continúen en el futuro.