Mariano Díaz ha sido un nombre recurrente en las conversaciones sobre el Real Madrid en los últimos años, y no precisamente por su rendimiento en el campo. El delantero, actualmente sin equipo, llegó a la Casa Blanca tras una destacada temporada en el Olympique de Lyon, donde logró 21 goles y 6 asistencias en 48 partidos. Su impresionante actuación despertó el interés del club merengue, que lo reclutó para cubrir la baja de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, la historia de Mariano en el Madrid ha estado marcada por la controversia y la falta de oportunidades.
En una reciente entrevista en el programa Los Amigos de Edu, Mariano compartió detalles sobre su fichaje y su decisión de no abandonar el club hasta el final de su contrato. A pesar de recibir ofertas tentadoras, como la del Sevilla, el delantero no dudó en elegir al club que lo formó. “Cuando el Sevilla hizo la oferta, el Madrid ejerció el derecho de tanteo. El Madrid es el equipo que me ha criado, el mejor club del mundo. Cuando me llaman, no me lo pienso”, confesó.
Una elección difícil
Mariano admitió que le dolió rechazar al Sevilla, un club que siempre le había atraído. “Me supo muy mal con el Sevilla y se lo expliqué. A lo mejor hubiera venido otro equipo y…”, reflexionó. Sin embargo, su amor por el Madrid y su deseo de demostrar su valía lo llevaron a permanecer en el club, a pesar de que su participación fue disminuyendo drásticamente desde la llegada de Julen Lopetegui.
“No fue por tema económico, sino deportivo. Tuve ofertas de Catar, Turquía o Arabia, pero entendía que ese no era mi sitio”, explicó Mariano, quien se sintió relegado al banquillo ante la competencia de figuras como Benzema. “Yo he llegado al Madrid, lo difícil que es llegar y hay pocos jugadores que lo hacen. Ese era mi sueño. Uno siempre piensa que voy día a día, voy a demostrar que puedo jugar aquí”, añadió con determinación.
La situación de Mariano es un reflejo de la complejidad del fútbol moderno, donde las decisiones no siempre son fáciles y las oportunidades pueden ser efímeras. A medida que el mercado de fichajes se agita, el futuro del delantero se mantiene incierto, pero su historia en el Real Madrid es un recordatorio de la pasión y el compromiso que muchos jugadores sienten por el club.