Thibaut Courtois, el guardameta del Real Madrid, ha sido descartado para la próxima convocatoria de la selección belga debido a una sacroilitis que le ha sido diagnosticada tras una serie de pruebas médicas. Este contratiempo físico ha llevado a la Federación Belga de Fútbol a anunciar que el portero no estará disponible para los partidos de clasificación contra Macedonia del Norte y Gales, cruciales para el próximo Mundial de selecciones que se celebrará en Norteamérica en 2026.
La situación ha sido analizada en conjunto por los servicios médicos de la selección y del club, quienes han llegado a la misma conclusión: Courtois necesita tiempo para recuperarse adecuadamente. La Federación Belga ha emitido un comunicado claro: "El portero no está en condiciones para jugar en los próximos partidos internacionales". Esto representa un golpe para el equipo dirigido por Rudi García, que deberá buscar alternativas en la portería.
Un respiro para el Madrid
A pesar de la mala noticia para la selección, en el Real Madrid se respira un aire de alivio. Courtois se centrará en su recuperación con la vista puesta en el Mundial de Clubes, que comenzará el próximo 15 de junio. El primer partido del equipo blanco está programado para el 18 de junio, lo que le da al portero tiempo suficiente para recuperarse y estar en óptimas condiciones para la competición.
Este torneo no solo es vital para el club en términos de prestigio, sino que también ofrece suculentos premios económicos que podrían beneficiar tanto a los jugadores como a la institución. La importancia de este evento es indiscutible, especialmente en una temporada que ha sido complicada para el equipo.
Un futuro incierto
La situación de Courtois también plantea interrogantes sobre su futuro en el club. Con la posibilidad de una renovación de contrato hasta el verano de 2028, su estado físico podría influir en las decisiones de la directiva. Las cuatro lesiones que ha sufrido en esta temporada han generado dudas sobre su continuidad, a pesar de que su rendimiento individual sigue siendo destacado.
La sacroilitis, que provoca un dolor considerable en la parte baja de la espalda, es un problema que Courtois ha de manejar con cuidado. Afortunadamente, el diagnóstico ha llegado a tiempo, y el tratamiento que iniciará le permitirá estar de vuelta en el terreno de juego lo antes posible.
En resumen, aunque Courtois no podrá defender los colores de Bélgica en los próximos encuentros, su enfoque ahora está en el Mundial de Clubes, donde el Real Madrid espera contar con su presencia para luchar por un nuevo título.