El futuro de Luka Modric se ha convertido en uno de los temas más candentes del fútbol europeo tras su anuncio de que dejará el Real Madrid al finalizar el Mundial de Clubes, que se celebrará entre el 14 de junio y el 13 de julio. Después de 13 años de éxitos y gloria en el Santiago Bernabéu, el croata se prepara para una nueva etapa en su carrera, sumando hasta la fecha un total de 591 partidos con la camiseta blanca.
Los rumores sobre su próximo destino no se han hecho esperar. Aunque se había especulado sobre un posible traspaso al Inter Miami, donde podría reunirse con Leo Messi, el Milan ha tomado la delantera en la carrera por hacerse con los servicios del mediocampista. Según informaciones de Marca, el director deportivo del club italiano, Igli Tare, ha viajado a Croacia con la intención de convencer a Modric de unirse a sus filas.
El Milan, que ha visto partir a Tijjani Reijnders al Manchester City por más de 70 millones de euros, busca reforzar su mediocampo y considera a Modric como una pieza clave para su proyecto. Sin embargo, el hecho de que el club rossonero no participará en competiciones europeas la próxima temporada podría ser un obstáculo para el croata, quien ha expresado su deseo de seguir compitiendo al más alto nivel.
Un regreso a sus raíces o un nuevo desafío en la MLS
Además del Milan, otros clubes también han mostrado interés en el Balón de Oro. El Dinamo de Zagreb, donde Modric comenzó su carrera, y equipos de la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos, como el New York City FC, están en la lista de pretendientes. La MLS ha demostrado su capacidad para atraer a grandes estrellas, y la llegada de Modric podría ser un gran golpe mediático.
Por otro lado, la posibilidad de reencontrarse con Cristiano Ronaldo, quien actualmente juega en el Al Nassr, añade un atractivo adicional a la opción de la liga saudí. Cristiano, en un emotivo mensaje de despedida, expresó su admiración por Modric, lo que podría influir en la decisión del croata.
En definitiva, el futuro de Luka Modric es incierto, pero lo que es seguro es que su legado en el Real Madrid es indiscutible. Con múltiples opciones sobre la mesa, el mediocampista deberá sopesar cuidadosamente su próximo paso en una carrera que ha sido un ejemplo de profesionalismo y éxito.