El Santiago Bernabéu se llenó de nostalgia y emoción durante el Corazón Classic Match, un evento que reunió a las leyendas del Real Madrid en un enfrentamiento contra el Borussia Dortmund. Este año, la cita fue aún más especial, ya que varios ídolos como Marcelo, Kroos, Varane y Pepe hicieron su debut en este formato tras sus recientes retiros. Sin embargo, el verdadero protagonista fue el eterno Raúl González, quien, con su icónico número siete a la espalda y el brazalete de capitán, volvió a demostrar que su olfato goleador sigue intacto.
El exdelantero del Real Madrid, que dejó una huella imborrable en la historia del club, se hizo presente en el marcador al aprovechar un rebote de Raphael Varane. Con una anticipación digna de su legado, Raúl se lanzó a cabecear el balón, marcando un gol que hizo vibrar a los aficionados presentes en el estadio que tantas veces coreó su nombre.
Raúl, quien se despidió del club en 2010 como el máximo goleador de la historia del Real Madrid, ha sido parte fundamental de la historia del club, levantando tres Champions y dejando un legado que perdura en el tiempo. Aunque sus registros fueron superados por Cristiano Ronaldo y Karim Benzema, su figura sigue siendo un símbolo de grandeza y pasión por el fútbol.
En otro ámbito, la selección brasileña ha dado un paso significativo al incorporar a Davide Ancelotti, hijo del legendario Carlo Ancelotti, a su cuerpo técnico. La CBF anunció oficialmente que Davide se unirá a la Canarinha en su misión de recuperar la gloria en el Mundial de 2026. Con una carrera construida al lado de su padre, Davide ha estado presente en los banquillos de grandes clubes europeos y ahora se enfrenta al desafío de dirigir a una de las selecciones más exitosas de la historia.
El debut de Davide en el banquillo de Brasil se producirá en el último partido de las clasificatorias para el Mundial, donde se espera que su experiencia y conexión con su padre aporten una nueva perspectiva al equipo. La afición brasileña, que ha estado esperando más de dos décadas por un nuevo título mundial, ve en esta dupla una oportunidad para revivir la magia del fútbol brasileño.
La llegada de los Ancelotti a la selección ha generado una gran expectativa entre los aficionados, quienes esperan que esta unión traiga de vuelta la chispa y la competitividad que caracterizaban a la Seleçao. Con el Mundial a la vista, la presión está sobre los hombros de Carlo y Davide para construir un equipo que pueda competir al más alto nivel y devolver a Brasil a la cima del fútbol mundial.