En un análisis reciente del informe Deloitte Annual Review of Football Finance, se ha puesto de manifiesto la abrumadora superioridad financiera del Real Madrid en comparación con el FC Barcelona. La temporada 2023-24 ha visto a los dos gigantes del fútbol español generar casi la mitad de los ingresos de La Liga, alcanzando un impresionante 48% del total.
El Real Madrid se ha convertido en el primer club en superar la barrera de los 1.000 millones de euros en facturación, un hito que resalta la brecha creciente entre los grandes y el resto de los equipos de la competición. Mientras tanto, el Barcelona ha sufrido un descenso del 38% en sus ingresos por día de partido, debido a las obras en el Camp Nou y su traslado temporal a Montjuic, un estadio con menor capacidad.
La remodelación del Santiago Bernabéu ha sido clave para el éxito financiero del Real Madrid, que ha visto un aumento del 28% en los ingresos por inversiones en estadios, alcanzando los 700 millones de euros en total. Este esfuerzo ha permitido al club blanco duplicar sus ingresos por día de partido, con un incremento de 126 millones de euros en comparación con la temporada anterior.
Por otro lado, el Barcelona, que no se clasificó para el Mundial de Clubes, ha visto cómo su situación se complica aún más. La FIFA está considerando ampliar el número de participantes en el torneo de 32 a 48 equipos para 2029, lo que podría abrir una puerta para que el club culé regrese a la competición internacional tras un ciclo decepcionante en Europa.
El Real Madrid, por su parte, se prepara para afrontar el Mundial de Clubes con la ambición de convertirse en campeón del mundo, un logro que consolidaría aún más su estatus como el club más laureado de la historia. Mientras tanto, el Barcelona observa desde la distancia, lidiando con las consecuencias de su falta de éxito en competiciones europeas.
En resumen, el panorama financiero de La Liga se ha transformado, con el Real Madrid a la cabeza y el Barcelona enfrentando desafíos significativos. La diferencia en ingresos y éxitos deportivos se hace cada vez más evidente, y el futuro de ambos clubes podría depender de cómo manejen sus respectivas situaciones en los próximos años.