Las alarmas han sonado en el Real Madrid tras el reciente empate contra el Al Hilal, donde se evidenció una vez más la falta de un organizador en el centro del campo. Esta carencia, que ya se había manifestado la temporada pasada, ha llevado a Xabi Alonso a solicitar un refuerzo específico para mejorar la calidad en la distribución del juego.
Según el subdirector del diario Marca, Carlos Carpio, el técnico español ha puesto su mirada en Zubimendi, un futbolista que podría aportar el perfil que el equipo necesita. Sin embargo, la respuesta de la directiva ha sido clara: no se contempla la llegada de nuevos jugadores en esa posición, ya que consideran que la plantilla actual es suficiente.
En una reunión reciente con Florentino Pérez y José Ángel Sánchez, Alonso expresó su preocupación por la falta de un distribuidor de juego en el equipo. A pesar de su insistencia, la directiva se mantiene firme en su decisión, argumentando que el rendimiento de los actuales centrocampistas debe ser evaluado antes de considerar cualquier fichaje.
Carpio reveló que, a menos que el Mundial de Clubes traiga consigo un desastre absoluto, no se reabrirá el debate sobre la incorporación de un nuevo mediocampista. Además, se ha mencionado que Güler, quien tuvo un papel limitado la temporada pasada, podría tener más protagonismo en el esquema de Alonso.
La situación plantea un dilema para el Real Madrid, que debe encontrar un equilibrio entre la confianza en su plantilla actual y la necesidad de adaptarse a las exigencias del juego moderno. La presión está sobre Alonso, quien deberá trabajar con lo que tiene y buscar soluciones creativas para mejorar el rendimiento del equipo.
En este contexto, el análisis de expertos como Álvaro Benito se vuelve crucial. Benito ha señalado que, aunque podría faltar un mediocampista creativo, el éxito del equipo dependerá de su capacidad para funcionar como un colectivo cohesionado. La anarquía que ha caracterizado al Madrid en los últimos años podría ser un obstáculo, pero también una oportunidad para que Alonso implemente su visión de juego.
El futuro del Real Madrid y de su nuevo entrenador está en juego, y la afición espera ansiosa ver cómo se desarrollan los acontecimientos en las próximas semanas.